VI

Oraciones

ORACIONES

I. El Año Cristiano

II. La Iglesia

III. Las Naciones y La Familia

IV. Acciones de Gracias y Letanías

V. Oraciones y Versículos alternativos para el Culto

I. EL AÑO CRISTIANO

Adviento

«El Señor mismo con voz demando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero». (1 Tesol. 4:16)

«Jesucristo que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; si, ven, Señor Jesús». (Apoc. 22:20)

1. Dios omnipotente, danos gracia para despojarnos de las obras de las tinieblas y revestirnos dé la armadura de la luz, para qué en el día postrero, cuando nuestro Salvador vuelva en su glorioso majestad, resucitemos a la vida inmortal, para alabarte eternamente. Amén.

2. Oh, Señor Dios, Padre celestial, que por tu Hijo nos has revelado que los cielos y la tierra pasarán; te suplicamos que nos mantengas firmes en tu palabra y en la verdadera fe. Protégenos del pecado y presérvanos de la tentación, a fin de que nuestros corazones estén siempre vigilantes y en oración; esperando tu Hijo amado. Amén

Navidad

«No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo; que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor». (Lucas. 2:10-11)

3. Omnipotente Dios, que nos diste a tu Unigénito Hijo para que tomase sobre sí nuestra naturaleza, y naciese en un tiempo como éste, de una virgen pura; concede, que siendo regenerados y hechos tus hijos por adopción y gracia, seamos cada día renovados con tu Santo Espíritu; mediante el mismo Jesucristo, nuestro Señor, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.

4. Oh Dios, que en la primera Navidad enviaste a tu Hijo para ser el salvador del mundo, enséñanos a agradecer tu gran bendición; ayúdanos a odiar el mal que vino, a destruir, y a recibir la vida eterna que vino a conceder; de manera que podamos amarte con todas nuestros fuerzas y servirte fielmente hoy y toda la vida; por el mismo Cristo, nuestro Señor. Amén.

5. Padre omnipotente, que has llenado el mundo con la luz de tu amado Hijo, la Palabra encarnada; concédenos, te suplicamos, que así como El enciende la llama de la fe y del amor, del mismo modo su luz fulgure en nuestras vidas; para alabanza tuya. Amén.

Año Nuevo

6. Todopoderoso Dios, en quien no hay mudanza, ni sombra de variación, nos has traído hasta el comienzo de este nuevo año; límpianos de todos los pecados pasados y concede que al comenzar este año sirvamos a tu honra y gloria; por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

7. Oh Cristo, que eres el Alfa y Omega, el principio y fin, y cuyos años no se acabarán; concédenos que de tal manera pasemos por el año que comienza, que en todas las cosas te agrademos y glorifiquemos tu nombre. Amén

Epifanía

«Porque desde donde el sol nace basta donde se pone, es grande mi nombre entre las naciones; y en todo lugar se ofrece a mi nombre, incienso y ofrendo limpia, porque grande es mi nombre entre las naciones, dice Jehová de los ejércitos». (Malaquías 1:11)

8. Oh Dios que con el fulgor de una estrella guiaste a los reyes a contemplar a tu Hijo nuestro Señor, concédenos tu gracia para guiar a los que no te conocen, para encontrarles, y que tal como ellos le ofrecieron oro, incienso y mirra, nosotros, le ofrezcamos ,un corazón amante, un espíritu ardiente y una voluntad obediente; para su honor y gloria. Amén.

Cuaresma

«Examiname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos; y vé si hay en mi camino de perversidad, y guíame en el camino eterno». (Salmo 139:23-24)

9. Todopoderoso y eterno Dios que no aborreces cosa alguna de las que has hecho, y perdonas los pecados de los que se arrepienten, crea y forma en nosotros corazones contritos y nuevos, a fin de que deplorando nuestros pecados y reconociendo nuestras miserias te alcancemos a ti, Dios de toda misericordia, perdón y remisión perfecta, mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

10. Oh Dios, que sabes nos hallamos rodeado de tantos y tan grandes peligros, que a causa de la fragilidad de nuestro naturaleza no podemos estar siempre firmes en lo justo; concédenos la fortaleza y la protección necesarias para sostenernos en todo peligro, y triunfar de toda tentación; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

11. Oh Señor, que por amor nuestro, ayunaste cuarenta días y cuarenta noches; concédenos tal abstinencia, que estando nuestra carne sujeta al Espíritu obedezcamos siempre tu divina voluntad en verdadera Justicia y santidad, a honra y gloria tuya, que vives y reinas con Dios Padre, y el Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.

12. Dios todopoderoso, que sabes bien que no hay en nosotros poder alguno para defendernos; guárdanos exteriormente en nuestros cuerpos, e interiormente en nuestros almas, para que seamos librados de todas las adversidades que puedan molestar al cuerpo, y de los malos pensamientos que puedan ofender y dañar al alma; por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Bautismo de Cristo

13. Todopoderoso Dios que ordenaste que tu Hijo Jesucristo fuera bautizado por nosotros, concede que de tal manera vivamos por su poder que repose sobre nosotros el Espíritu Santo, de modo que podamos manifestar la vida que Jesús nos ha dado. Amén.

La Transfiguración

14. On Dios, que en el santo monte revelaste a tus escogidos testigos tu bien amado Hijo maravillosamente transfigurado; concede que nosotros mirando a cara descubierta la gloria del Señor, seamos transformados de gloria en gloria, en la misma imagen, por el Espíritu del .Señor. Amén.

Domingo de Ramos

15. Eterno Dios permite que haya en nosotros el sentir que hubo también en Cristo Jesús; que como El en su alto trono se humilló hasta la muerte de la cruz, así nosotros en nuestra pequeñéz nos humillemos, obedeciendo, y viviendo para la gloria tuya; por el mismo Jesucristo. Amén.

Jueves Santo

16. Oh Salvador del mundo, que en el huerto de Gefsemaní aceptaste la copa de amargura en sumisa obediencia al Padre; juzga con misericordia nuestras débiles y errantes vidas, y dános fortaleza y valor para avanzar por el sendero del deber, siguiendo el ejemplo de tu perfecta obediencia para tu honor y gloria. Amén.

Viernes Santo

«¿No os conmueve a cuantos pasáis por el camino? Mirad, y ved si hay dolor como mi dolor que me ha venido; porque Jehová me ha angustiado en el día de su ardiente furor». (Lam. 1:12)

«Mas El, herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre El, y por su llaga fuimos nosotros curados». (Isaías 53:5)

17. Todopoderoso Padre, cuyo bendito Hijo, por su solo perfecto y suficiente sacrificio, ha abierto para nosotros un camino nuevo a tu presencia; concede que acercándonos a ti con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, podamos encontrar limpieza y paz; y danos gracia para que mantengamos firme la profesión de nuestro esperanza y nos sirvamos unos a otros con amor y buenas obras; por los méritos del mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Pascua de la Resurrección

Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.
Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura de sinceridad y de verdad. (1 Coro 5:7, 8)

Sabiendo Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya no muere; la muerte no se enseñorea más de El. Porque en cuanto murió, al pecado murió una vez por todas; mas en cuanto vive, para Dios vive.
Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios Cristo Jesús, Señor nuestro. (Rom. 6:9-11)

Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho. Porque por cuanto la muerte entró por un hombre también por un hombre la resurrección de los muertos. Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. (1 Coro 15:20-22)

Gloria sea al Padre, y al Hijo; y al Espíritu Santo: Como era al principio, es ahora, y ser siempre: por los siglos de los siglos. Amén.

18. Todopoderoso Dios, cuyo bendito Hijo resucitó por nosotros, victorioso sobre el pecado y la muerte; concede que nosotros, siendo resucitados con El pongamos nuestra mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra; de modo que cuando El en nuestra vida se manifieste, nosotros también seamos manifestados con El en la gloria; mediante el mismo Jesucristo. Amén.

Ascensión

«Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación, y no por sangre de machos cabrios ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención». (Heb. 9:11-12)

19. Otórganos, suplicámoste, oh Dios omnipotente, que como creemos que tu Unigénito Hijo subió a los cielos, también subamos allá con nuestro corazón y nuestro mente, y habitemos siempre con El en los lugares celestiales, por los siglos de los siglos. Amén.

Pentecostés

«Recibiréis poder; cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos ........». (Hechos 1:8)

«Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones al Espíritu de su hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre!» Gálatos 4:6)

20. Oh Dios omnipotente, que en el, día de Pentecostés llenaste a tu Iglesia de poder, y le otorgaste tus dones; concédenos que de tal manera seamos llenos del poder del Espíritu Santo, que podamos ministrar a un mundo necesitado; por los méritos de Jesucristo nuestro Señor. Amén.

21. Dios de luz, Tu que enseñaste a los corazones de tu pueblo fiel, enviándole la luz de tu Espíritu Santo; concédenos, por el mismo Espíritu, que tengamos un juicio recto en todas las cosas, y por siempre nos gocemos en su fortaleza; por Jesucristo tu Hijo, nuestro Señor. Amén.

Trinidad

22. Dios omnipotente y eterno, que has concedido a tus siervos la gracia de reconocer en la creación y la redención; la obra gloriosa de la eterna Trinidad; danos oh Padre, él poder de obedecerte, glorificando a tu Hijo y dando a tu Santo Espíritu el dominio de todo nuestro ser. Amén.

Días de Santos

23. Andrés
Díos todopoderoso, que por tu gracia hiciste que tu santo Apóstol Andrés obedeciese prestamente al llamamiento de tu Hijo Jesucristo, y a El siguiese sin dilación alguna, danos también gracia a todos nosotros, para que, siendo llamados por tu santo Palabra, nos entreguemos sin tardanza a cumplir obedientemente tus santos mandamientos; mediante el mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

Saints' Days

Noviembre 30

24. Tomás
Soberano Dios, que dejaste testimonio de la experiencia de Tomás quien dudó la resurrección de Cristo; concede que nosotros creamos y adoremos a tu Hijo aun sin verle para que andemos no por la vista sino por la fe; mediante Jesucristo nuestro Señor y Dios. Amén.
 

25. Esteban
Concede, oh Señor, que en todos nuestros sufrimientos aquí en la tierra, por el testimonio de tu verdad, fijemos nuestro vista en el cielo, y por fe veamos la gloria que ha de ser revelado; y llenos del Espíritu Santo, amemos y bendigamos a nuestros perseguidores, siguiendo el ejemplo del mártir Esteban que rogó a ti por sus verdugos, confiando en Jesús, quien está a la diestra de Dios, listo para socorrer a todos los que sufren por su nombre. Amén.
 

26. Juan
Oh Dios todopoderoso, quien por tu Apóstol Juan nos has revelado el misterio del Verbo hecho carne; guárdanos siempre en la fe que el hijo de Dios ha legado a la tierra, para que confiando en El como el camino; la verdad y la vida, nosotros podamos tener salvación por el nombre del mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

27. Pablo
Omnipotente Dios, cuyo siervo Pablo desde su conversión proclamaba el glorioso mensaje de salvación; haz que nosotros siguiendo su buen ejemplo, seamos fieles testigos tuyos; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

28. María virgen
Oh bondadoso Dios, cuya sierva la virgen María aceptó con gozo tu voluntad, haz que nosotros, inspirados por su fe, aceptemos tu voluntad para nuestra vida regocijándonos en el poder del Espíritu Santo; mediante Jesucristo nuestro Salvador. Amén.
 

29. Marcos
Dios todopoderoso, que enseñas a tu Iglesia por el Evangelio de tu siervo Marcos, haz que nosotros no seamos niños fluctuantes sino que permanezcamos en tu verdad; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

30. Felipe
Oh Señor y Maestre Jesús, Tú dijiste al Apóstol Felipe: el que me ha visto, ha visto al Padre; revélate, a nuestros corazones, te rogamos, y así, abre les ojos de nuestro entendimiento para ver en ti la luz del conocimiento de la gloria de Dios; por el honor de tu santo nombre.
 

31. Bernabé
Oh Señor, Dios todopoderoso, que enriqueciste a tu siervo Bernabé con dones excelentes del Espíritu Santo: te suplicamos no nos dejes destituídos de la abundancia de tus dones, ni de la gracia de usarlos siempre para la honra y gloria tuya; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

32. Juan Bautista
Dios todopoderoso, por cuya providencia tu siervo Juan Bautista nació milagrosamente, y fue enviado a preparar el camino de tu Hijo, nuestro Salvador, predicando el arrepentimiento; concede que sigamos de tal manera su santa vida, y doctrina, que de acuerdo a su predicación nos arrepintamos verdaderamente; y que a ejemplo suyo hablemos la verdad constantemente, reprochemos con denuedo los vicios y suframos con toda paciencia por causa de la verdad; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

33. Pedro
Dios todopoderoso, que por tu Hijo Jesucristo dotaste de excelentes dones a tu Apóstol San Pedro, y le ordenaste apacentar con todo empeño tu rebaño; te suplicamos que concedas a todas los obispos y pastores la gracia de predicar diligentemente tu santa Palabra, y al pueblo el deseo de cumplir a obedientemente, a fin de que pueda recibir la corona de la lo gloria eterna; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

34. Santiago
Oh Dios misericordioso, concede, que como tu Apóstol Santiago, dejando a su padre y todo lo que tenía, sin tardanza alguna obedeció el llamamiento de tu Hijo Jesucristo, y le siguió; así nosotros abandonemos nuestros afectos mundanos y carnales y estemos siempre dispuestos a seguir tus santos mandamientos; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

35. Mateo
Oh todopoderoso Dios, que por la boca de tu bendito Hijo, llamaste a Mateo del banco de los tributos, para que de publicano se convirtiese en apóstol y evangelista; danos gracia para renunciar a toda avaricia, y desordenado deseo de riquezas, y seguir al mismo Jesucristo tu hijo, que en unidad del Espíritu Santo vive y reine contigo eternamente. Amén.
 

36. Lucas
Oh misericordioso Dios, cuyo siervo Lucas se preocupaba por los enfermos, haz que ellos miren a ti, su amparo y fortaleza, para que reciban la sanidad que necesitan; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

37. Todos los Santos
Todopoderoso Dios que nos has llamado a la fe y a tu servicio y nos has dado una tan gran nube de testigos o nuestro alrededor, permite que de tal manera nosotros sigamos su ejemplo y el testimonio de sus vidas que podamos despojarnos de todo peso y del pecado que nos asedia y correr con paciencia la carrera que tenemos por delante; fijos nuestros ojos en Jesús. Amén.
 

38. Ministerio de los Angeles
Oh Dios eterno, que has ordenado y constituido los servicios de los ángeles y los hombres en orden maravilloso; otorga, misericordiosamente, que como tus santos ángeles te sirven siempre en el cielo, así por tu mandato nos socorran y defiendan en la tierra; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

DIAS ESPECIALES

Día de la Biblia

39. Bendito Señor, que hiciste que las Santa Escrituras se escribiesen para nuestra enseñanza; concede que de tal manera las oigamos, las leamos, las consideremos, las aprendamos y las examinemos cuidadosamente, que podamos asimilarlas en nuestro interior, para que por medio de la paciencia, y del consuelo de tu santa Palabra, abracemos y conservemos hasta el fin, la esperanza bendita de la vida eterna, que Tú nos has dado en Jesucristo nuestro Salvador. Amén.

40. Te damos gracias misericordioso Señor, cuyos cielos cuentan tu gloria, que te dignaste revelarte a los hombres de tu Palabra dada a nosotros por medio de tus siervos los Profetas y Apóstoles y por tu Hijo Jesucristo el Verbo encarnado; te damos gracias por esta Palabra viva que hoy podemos leer y nos fortalece para la tarea de cada día; mediante Jesucristo. Amén.

41. Oh Señor Jesucristo en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento, concédenos la gracia y humildad para recibir tu santa Palabra; mediante la cual podemos llegar a ser sabios para la salvación, para la honra de tu nombre. Amén.

Día de la Patria

42. Dios eterno, creador de todas las naciones, te damos gracias por nuestro país en que nos has puesto, por los que lucharon por su libertad y sacrificaron todo para que esta nación llegara a ser un país libre; te suplicamos por todos nuestros ciudadanos para que lleguen a conocer la verdadera libertad que hay en Cristo Jesús. Amén.

43. Oh Dios eterno, que has guiado a esta nación de ........... en los años pasados, te suplicamos que en tu gracia pueda seguir en prosperidad tanto material como espiritual; mediante el conocimiento, de tu verdad. Amén.
 

Día del Padre

44. Oh Dios que has hecho al hombre cabeza de la mujer, concede a los padres en cada hogar, de tal manera dirigir sus familias, que puedan responder ante ti sin temor de la responsabilidad que Tú les has encomendado; mediante Jesucristo la Cabeza de la Iglesia. Amén.
 

Día de la Madre

45. Oh Señor Jesucristo que naciste de una madre humana y cuidaste de ella aun desde la cruz, encomendamos a ti las madres de nuestra nación, que puedan ellas ser ejemplo y testimonio para sus hijos y para muchos, de tu amor y gracia; mediante tu poder. Amén.
 

Día de Vigilia

46. Oh Señor que has hecho a tu Iglesia responsable de testificar a un mundo en tinieblas, concede que de tal manera podamos estar en vigilia delante de ti, que puedas dar un despertamiento en los corazones de los hombres a tu verdad; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

47. Oh Señor, que has prometido dar a tu pueblo avivamiento para que tu Iglesia pueda testificar con poder a la humanidad, concede que estemos dispuestos a pagar el precio de humillarnos y orar buscando tu rostro y de convertirnos, de nuestros malos caminos, para que puedas perdonarnos y sanar nuestra tierra, para gloria de tu nombre. Amén.

II. LA IGLESIA

La Iglesia Universal

48. Oh Padre bondadoso, humildemente te suplicamos por tu santa Iglesia universal, que te dignes llenarla de toda verdad, en perfecta paz. Donde haya mancha, purifícala; donde esté en error, refórmala. En lo que sea justa, establécela; y cuando esté dividida, únela; por amor de Aquél que vive siempre para interceder por nosotros; Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

49. Señor, oramos por tu Iglesia que se encuentra perpleja por los cambios y problemas de nuestros tiempos; llénanos de nuevo con el Espíritu de Pentecostés y ayúdanos a aprender de ti y en cada senda desconocido danos valor para seguir con denuedo, al que es el mismo hoy y ayer y por los siglos; nuestro Salvador Jesucristo. Amén.

50. Omnipotente y eterno Dios, que eres el solo autor de obras maravillosas; envía sobre nuestros Obispos y otros Ministros y todas las· congregaciones encomendadas a su cargo, el saludable Espíritu de tu gracia; y para que ellos verdaderamente te agraden llénalos de tu gracia y de tu sabiduría; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

51. Oh Padre celestial, que no salvas por ejército ni por fuerzo, mas por tu Espíritu, humildemente te suplicamos que derrames tu santo Espíritu de lo alto. Dá a tu Iglesia Universal una nueva visión de tu gloria; una nueva consagración a tu servicio, para la salvación de los perdidos y la gloria de Jesucristo nuestro Señor y Salvador. Amén.
 

La Congregación Local

52. Oh Dios misericordioso, que por tu gracia nos has llamado a tu servicio, suplicámoste bendecir y prosperar tu obra en este lugar; únenos en amor fraternal como miembros del cuerpo de Cristo; enséñanos a adorarte en espíritu y verdad; inspíranos a dar fiel testimonio por palabra y obra para la extensión de tu reino; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

53. Oh Padre de amor, cuyo Hijo vino a este mundo para redimir a un pueblo santo para sí, pedimos que esta congregación sea un ejemplo digno de la familia espiritual de Cristo, que el Espíritu Santo la guíe en la verdad de tu Palabra y la dirija en crecimiento de amor y compasión para que todos piensen los unos por los otros guardando la unidad del Espíritu por el honor de nuestro Señor y Salvador. Amén.

Dedicación

54. Oh Dios santísimo, cuya gloria llena los cielos y la tierra, cuyo espíritu mora con tu pueblo, santifica esta casa de oración, dedicada a tu alabanza y servicio, para que dentro de ella los hombres, oyendo tu palabra, y siendo nacidos de nuevo, puedan entrar en tu reino; mediante Jesucristo nuestro Salvador. Amén.

Local

55. Oh Señor, concede que lo puerta de este lugar donde tu pueblo se reune, sea para muchos el portal a una vida nueva que nunca sea tropiezo para nadie sino el umbral de tu reino celestial; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Nuevos obreros

56. Oh Dios todopoderoso, quien por tu Espíritu nos has llamado a apartar a estos hermanos para que se consagren a la nueva obra en N............................ , fortalécelos por el mismo Espíritu, protégelos de los ataques de Satanás, aliéntalos en adversidad, para que vuelvan regocijándose en ti, su Salvador; mediante Jesucristo. Amén.  

Uno Nueva Obra

57. Oh Dios misericordioso, que no deseas la muerte del pecador, sino que se convierta y viva; haz que por el testimonio de estos hermanos, que han de proclamar tu evangelio, en .........................................., muchos lleguen a conocer a Cristo el Salvador. Concede que tus siervos con todo denuedo hablen tu palabra, que no sean desviados en su empresa por las asechanzas de Satanás, y que anden siempre llenos de tu Espíritu; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

El Aniversario

58. Oh, Dios todopoderoso, que inspiraste a tus siervos a empezar la obra en este lugar; recordando con gratitud su testimonio, te agradecemos por tus bendiciones derramadas sobre nosotros durante este año pasado. Haz que nosotros enseñados por tu Palabra, encendidos por tu amor y llenos de tu Espíritu te sirvamos a ti, nuestro Señor, y a nuestros semejantes; mediante Jesucristo, nuestro Salvador. Amén.

La Juventud

59. Nuestro Dios que por medio de tu apóstol Pablo, has dicho en tu palabra que no nos has dado espíritu de cobardía sino de poder, de amor y de dominio propio; concede que nuestra juventud sea llena de tu Espíritu Santo de modo que puedan resistir todos los ataques del enemigo en sus vidas; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.
 

Misiones y Extensión

60. Oh Dios que has hecho de una sangre a todas las naciones del género humano y enviaste a tu bendito Hijo a predicarles la paz, concede que todos los hombres donde quiera que se hallen, te busquen y te encuentren. Reune a tus elegidos en tu redil, derrama tu Santo Espíritu sobre ellos y apresura la venida de tu reino; por Jesucristo nuestro Salvador. Amén.

61. Muéstranos, oh Señor, en este día en que somos llamados a testificar de ti, como podemos efectivamente presentar el evangelio a aquellos que están fuera de tus promesas que el Espíritu Santo nos llene de amor hacia ellos y nos haga comprender sus necesidades para que nuestras vidas y nuestos hechos recomienden tu nombre y ellos reciban tu verdad; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

62. Todopoderoso Dios, que llamaste a los Profetas y a los Apóstoles para la edificación de tu Iglesia, concede que tu Espíritu Santo despierte en tus hijos los dones que Tú les has dado para que sirvan a tu pueblo y extiendan el conocimiento de tu verdad a todas los naciones; mediante Jesucristo. Amén.
 

General

Consagración

63. Oh Señor Jesús ayúdanos a serte fieles en las dificultades; cuando estamos solos y la lealtad a ti nos hace impopulares; cuando por hacer lo recto enfrentamos la burla y la antipatía; cuando nuestro deber requiere tiempo que no deseamos dar y pide dinero que no queremos dedicar; cuando nuestro deber pide esfuerzo que no queremos hacer, cuando todo va en contra de nuestros deseos; cuando no queremos perdonar a alguien que nos ha hecho daño. Oh Señor, ayúdanos a recordar que solos nada podemos hacer pero contigo todo es posible. Amén.

64. Nuestro Padre, nuestro Dios, como peregrinos pedimos tu guía para él viaje; como soldados pedimos tu fuerza para la batalla; como discípulos pedimos tu sabiduría, como embajadores de Cristo, tu gracia, para que recomendemos nuestro fe a todos los que no te conocen; por Jesucristo nuestro Señor y Salvador. Amén.

65. Misericordioso Señor, haz que conociendo tus misericordias, presentemos nuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a ti, como nuestro culto racional y no nos conformemos a este siglo, sino seamos transformados por medio de la renovación de nuestro entendimiento y podamos así comprobar cual sea tu bueno voluntad agradable y perfecta; mediante tu Hijo nuestro Salvador. Amén.

Amor

66. Oh Dios que resumes toda la ley en el único mandamiento de amor, de modo que, si no amamos a nuestro prójimo no podemos cumplir tu voluntad; humildemente te rogamos crear en nuestros corazones tal amor entre nosotros que seamos hijos fieles de nuestro Padre celestial y verdaderos discípulos de tu hijo Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Perdón

67. Todopoderoso Dios que por medio de tu Hijo, nos enseñaste a orar diciendo: perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdónanos a nuestros deudores, dános la gracia para perdonar a los que nos ofenden y mostrarles así, el perdón que Tú das a los pecadores; mediante Jesucristo nuestro Redentor. Amén.

Lucha Espiritual

68. Todopoderoso Señor que permitiste que tu Hijo Jesucristo fuera tentado por Satanás, y que dices que es como un león rugiente andando alrededor nuestro buscando a quien devorar, haz que de tal manera nosotros seamos sobrios y velemos para que resistamos firmes por medio de la fe en Cristo que nos hace más que vencedores. Amén.

Victoria

69. Dios eterno y Padre celestial, que nos has dado el ejemplo de tu Hijo que derrotó al Diablo y nos exhortas a resistirle para que con el poder de tu Palabra, lo derrotemos diariamente; por Jesucristo tu Hijo. Amén.

El Testimonio

70. Todopoderoso Dios que enviaste a tu siervo Juan el Bautista para ser heraldo de tu reino, y el precursor de tu Hijo, te suplicamos que de tal manera nosotros vivamos fieles a tu testimonio, que podamos llamar a los hombres al arrepentimiento y la fe; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Pureza de Vida

71. Oh Señor, que nos has exhortado por medio de tu apóstol Pedro a ceñirnos los lomos de nuestro entendimiento, haznos ser sobrios, a desechar toda malicio y todo engaño, toda hipocresía y envidia, y toda los distracciones. Haz que nuestra vida sea de tal manera pura por medio del poder de tu Espíritu Santo, que podamos manifestar tu gloria al mundo perdido; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Obediencia

72. Todopoderoso Dios que nos has revelado por medio de tu Apóstol Mateo, que Jesús es el Rey, permite que de tal manera nosotros le obedezcamos y le coronemos como tal en nuestros corazones, que el mundo pueda también hacerlo para la gloria de tu nombre. Amén.

Fe

73. Dios y Creador nuestro, que nos has creado en Cristo Jesús para buenas obras y que dices que la fe sin obras está muerta, haz que nosotros mostremos la genuinidad de nuestra fe; mediante tu Hijo nuestro Salvador. Amén.

Paz

74. Oh Dios, que eres autor de la verdadera paz, y amante de la concordia, conocerte es vida eterna y servirte pleno libertad. Defiende a estos, tus humildes siervos, de todos los asaltos de nuestros enemigos, para que, confiando plenamente en tu protección, no temamos la astucia de ningún adversario; mediante el poder de Jesucristo. Amén.

75. Señor haznos instrumentos de tu Paz. Que allí donde hayo odio, pongamos amor; donde haya ofensa, perdón; donde haya discordia, unidad; donde haya el error, tu verdad; donde haya desesperación, la fe; donde haya tristeza, la alegría. Que donde haya oscuridad, pongamos tu luz. Oh Maestro que no busquemos tanto: el ser consolados, como el consolar, el ser comprendidos, como el comprender, el ser amados como el amar; en el nombre de Jesucristo nuestro Príncipe de Paz. Amén.

Quietud de corazón

76. Oh Dios, de quien proceden todos los deseos santos, todos los buenos consejos y todas las obras justas; da a tus siervos la paz que el. mundo no les puede dar; a fin de que nuestros corazones se inclinen a cumplir tus mandamientos, y amparados por ti contra el temor de nuestros enemigos, podamos vivir en reposo y tranquilidad; por los méritos de Jesucristo nuestro Señor. Amén.

77. Oh Dios que eres la fortaleza de cuantos ponen su esperanza en ti, recibe nuestras súplicas, y ya que a causa de, nuestra fragilidad nada podemos hacer sin ti, concédenos el poder de tu Santo Espíritu para que guardando tu voluntad podamos agradarte de palabra y obra; mediante nuestro Señor. Amén.

78. Oh Señor, escucha nuestras súplicas, y ya que nos has dado el ardiente deseo de orar a ti, concédenos alientos en todas las circunstancias de la vida, por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

79. Dios omnipotente y eterno, concédenos el incremento de la fe; la esperanza y el amor, y para que obtengamos lo que Tú nos prometes, haz que amemos lo que Tú nos mandas y lo cumplamos con el poder de tu Espíritu; mediante Jesucristo tu Hijo. Amén.

80. Oh Dios, que eres el defensor de los que esperan en ti, sin quien no hay cosa fuerte ni santa, acrecienta y multiplica tu poder en nosotros a fin de que siendo Tú nuestro líder y guía, te sirvamos en novedad de vida; por amor de Jesucristo nuestro Señor. Amén.

81. Haz, oh Señor, que de tal manera tu Iglesia sea por ti gobernado, que en medio de todos los conflictos que tu gloriosa providencia ordena, testifique de tu Hijo amado por poder de tu Santo Espíritu. Amén.

82. Oh Dios, que has preparado para los que te aman bienes que exceden a los alcances del entendimiento humano, derrama en nuestros corazones tal amor a ti, que amándote por sobre todas las cosas alcancemos tus promesas que sobrepasa a todo lo que podamos anhelar; mediante tu Hijo. Amén.

83. Suplicámoste, Señor, nos concedas, el espíritu de pensar y hacer siempre lo que es justo; para que nosotros, que sin ti, nada bueno podemos hacer, seamos por ti capaces de vivir según tu santa voluntad; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

84. Oh Señor, cuyos oídos no están sordos y cuyo brazo no se ha acortado, haz que de tal manera obedezcamos la voz de tu Espíritu, que puedas concedernos lo que te pedimos; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

85. Omnipotente y eterno Dios, que estás siempre más dispuesto para oírnos que nosotros para pedirte, y que acostumbras darnos más de lo que deseamos y merecemos; derrama sobre nosotros la abundancia de tu misericordia; perdonando todo aquello por lo que nuestras conciencias están temerosas, y dándonos las cosas buenas que no somos dignos de pedirte, sino por los méritos y mediación de Jesucristo, tu Hijo nuestro Señor. Amén.

86. Oh Señor, Tú que habitas en las alturas y la santidad y con los quebrantados y humildes de corazón, enséñanos a obedecer tus mandamientos de modo que seamos participes de tus bendiciones; mediante Jesucristo tu Hijo nuestro Salvador. Amén.

87. Poderoso y eterno Dios, danos el aumento de la fe, de la esperanza y de la caridad; y, para que obtengamos lo que prometes haz que amemos lo que mandas; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

88. Señor, te suplicamos, concede gracia a tu pueblo para resistir las tentaciones del mundo, de la carne y del diablo, y para seguirte con corazones y ánimos puros a ti el único Dios; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

89. Concede, suplicámoste misericordioso Señor a tus fieles, perdón y paz, para que seamos limpios de todos nuestros pecados y te sirvamos con ánimo tranquilo; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

90. Oh Señor, suplicámoste, que absuelvas a tu pueblo de sus ofensas; para que por tu benignidad seamos libres de los ataduras de los pecados que por nuestro fragilidad hemos cometido; concédenos esto, oh Padre celestial, por amor de Jesucristo nuestro bendito Señor y Salvador. Amén.

91. Concede, te suplicamos, Dios omnipotente, que las palabras que hemos oído este día con nuestros oídos exteriores, sean de tal manera esculpidas interiormente en nuestros corazones, que produzcan en nosotros el fruto de bien vivir, a honor y alabanza de tu nombre; mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

92. Prevénnos, oh Señor, en todas nuestras acciones con tu benigno favor, y pruébanos con tu ayuda contínua, para que en todas nuestras obras, comenzados, continuadas y acabadas en ti, glorifiquemos tu santo nombre, y finalmente por tu misericordia, alcancemos vida eterna; mediante Jesucristo nuestra Señor. Amén.

93. Dios omnipotente, fuente de toda sabiduría, que conoces nuestras necesidades antes que pidamos, y nuestra ignorancia en pedir; te suplicamos tengas compasión de nuestras flaquezas, y te dignes concedernos todo lo que por temor de nuestra indignidad no nos atrevemos a pedir, y por nuestro ceguera no podemos rogarte. Concédenos, todo esto por los merecimientos de tu Hijo Jesucristo nuestro Señor. Amén.

94. Dios omnipotente, que has prometido oír las peticiones de los que piden en nombre de tu Hijo; te suplicamos inclines misericordiosamente, tus oídos a los que te hemos dirigido nuestros ruegos y súplicas; y concede que lo que hemos pedido fielmente según tu voluntad, sea efectivamente, obtenido, para alivio de nuestras necesidades, y engrandecimiento de tu gloria; mediante Jesucristo nuestro Señor; Amén.

Oración Matutina

95. Señor nuestro, Padre celestial, eterno y todopoderoso, que nos has traído al principio de este día; guárdanos en él con tu gran poder, y haz que no caigamos en ningún pecado, ni incurramos en ningún peligro, sino que todas nuestras acciones siendo dirigidas por ti, sean justas y agradables a tus ojos mediante Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Oración Vespertina

96. Quita nuestras tinieblas, te suplicarnos, oh Señor; y por tu gran misericordia guárdanos de todos los peligros y riesgos de esto noche; por amor de Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Oración de Juan Crisóstomo

97. Omnipotente Dios, que nos has, dado gracia para que en la ocasión presente te dirijamos de común acuerdo nuestras súplicas; y has prometido que cuando dos o tres estén congregados en tu nombre, les concederás sus peticiones; cumple ahora, oh Señor, los deseos y ruegos de tus siervos, como más les convenga; concediéndonos en este mundo conocimiento de tu verdad, y en el venidero, vida eterna. Amén.

Oración por todo el género humano

98. Oh Dios creador y conservador del género humano, humildemente te encomendamos los hombres de todas clases y condiciones, que te dignes de hacerles conocer tus sendas, y tu salud eterna a todas las naciones. Más especialmente te pedimos por el bienestar de la Iglesia universal, que cuantos profesan ser y se llaman cristianos, vayan por el camino de la verdad y guarden la fe en unidad de espíritu, en vinculo de paz y en rectitud de vida. Finalmente encomendamos a tu bondad paternal a cuantos se hallan afligidos o angustiados de cualquier modo ya sea en su alma, en su cuerpo, o en sus haberes (especialmente a ....:.............). Te suplicamos que los consueles y alivies según les convenga, dándoles paciencia en sus aflicciones, y feliz éxito en sus trabajos; por el amor de Jesucristo. Amén.